Los músculos hipaxiales de algunas salamandras provocan la exhalación al contraerse activamente para aumentar la presión abdominal y expulsar el aire de los pulmones.

Históricamente, los amniotas eran los únicos animales conocidos que usaban los músculos del tórax y el abdomen para expandir el cuerpo y llevar aire a los pulmones. Los siguientes animales en la cadena evolutiva, como los peces que respiran aire y los anfibios, usan un método conocido como bomba bucal que comprime el aire almacenado en una mandíbula extendida (Gans, 1970b; Liem, 1985 a través de Brainerd y Monroy 1998). Sirena lacertina, sin embargo, es una salamandra (no amniota) que utiliza un sistema similar a la bomba de aspiración que utilizan muchos amniotas para respirar. El nuevo método de respiración descubierto para ser utilizado por las salamandras se conoce como bomba de exhalación y la exhalación ocurre en dos fases. La primera fase es pasiva; el aire es expulsado de los pulmones por la presión hidrostática y la elasticidad de los pulmones. La segunda fase es activa y afecta al músculo transverso del abdomen. Al comprometer los músculos de la parte inferior del cuerpo (los músculos hipaxiales), la salamandra crea una presión activa dentro de la cavidad del cuerpo que expulsa el aire de los pulmones (Brainerd y Monroy 1998: 673).

Última actualización 14 de septiembre de 2016