Modificar tamaño/forma/masa/volumen
Muchos sistemas vivos alteran sus propiedades físicas, como el tamaño, la forma, la masa o el volumen. Estas modificaciones ocurren en respuesta a las necesidades del sistema vivo y/o condiciones ambientales cambiantes. Por ejemplo, pueden hacer esto para moverse de manera más eficiente, escapar de los depredadores, recuperarse del daño o por muchas otras razones. Estas modificaciones requieren índices y niveles de respuesta apropiados. La modificación de cualquiera de estas propiedades requiere materiales que permitan dichos cambios, señales para realizar los cambios y mecanismos para controlarlos. Un ejemplo es el pez puercoespín, que se protege de los depredadores tomando sorbos de agua o aire para inflar su cuerpo y erguir espinas incrustadas en su piel.
Envía señales de luz en el espectro visible
El espectro visible es la porción del espectro electromagnético que el ojo humano puede detectar. La luz visible se puede considerar de dos maneras: la luz como iluminación (como la que usan las luciérnagas) y los colores que resultan de la absorción o el reflejo de la luz. Los sistemas vivos usan la luz para una variedad de propósitos. A veces, lo usan para hacerse muy visibles (como un pavo real mostrando sus brillantes plumas a una posible pareja). Otras veces, lo usan para volverse virtualmente invisibles (como un búho escondido a simple vista cuando descansa durante el día). Cuando un sistema vivo envía una señal de luz, debe crear esa luz o color de una manera eficiente en cuanto a energía y materiales. Los sistemas vivos crean y mejoran el color usando estrategias tales como pigmentos no tóxicos, estructuras que se doblan y absorben diferentes longitudes de onda y procesos químicos que crean bioluminiscencia.