Los macrófagos usan la comunicación para escalar la fuerza de defensa a la amenaza

Si una casa se está quemando, los bomberos tratarán de apagar el fuego con agua. Aunque el agua en sí misma puede dañar una casa, es probable que sea menos dañina que el fuego. Una lógica similar se aplica a nuestro sistema inmunológico. Nuestro sistema inmunológico nos protege a través de medios físicos y químicos, pero en el proceso, también puede dañar nuestros propios tejidos al atacar nuestras propias células. ¿Cómo aplica nuestro sistema inmunológico suficiente defensa para cuidar de una lesión o infección, pero no tanto como para lastimarnos o incluso matarnos en el proceso?

Cuando nos lesionamos, nuestro cuerpo puede infectarse con microbios extraños. Por ejemplo, si se cae al suelo después de rasparse la rodilla, los microbios pueden ingresar a su cuerpo a través de la herida abierta. Por eso es importante mantener las heridas limpias. Si un área se infecta, el tejido que lo rodea se hincha y ciertas células llamadas macrófagos correr a la escena para atacar la infección.

Los macrófagos pueden atacar una infección de diferentes maneras. Por ejemplo, algunos atacan con toda su fuerza mientras que otros atacan con menos intensidad. La respuesta de un macrófago depende de varias cosas. Primero, los macrófagos individuales se comunican entre sí para determinar cuántos de ellos están en un sitio infectado. Cuantos más macrófagos hay, más atacan con toda su fuerza. Además, si los macrófagos han luchado contra el microbio anteriormente, un mayor número de ellos atacará con toda su fuerza. Siempre hay otros macrófagos cerca que están listos para atacar en caso de que la infección se vuelva más fuerte de repente. Sin embargo, si la herida es pequeña o hay menos microbios, los macrófagos responderán con menor intensidad.

Este ataque coordinado contra las infecciones por parte de los macrófagos ayuda a garantizar que nuestro sistema inmunitario no reaccione de forma exagerada y que la cantidad correcta de células inmunitarias esté trabajando tan duro como sea necesario en cualquier situación dada. La forma dinámica en que nuestras células inmunitarias reaccionan ante las amenazas puede brindar ideas a las personas para diseñar pautas de respuesta para todo tipo de situaciones potencialmente amenazantes, como la forma de evacuar edificios en caso de incendio o terremoto.

Última actualización de mayo 14, 2020