La forma del pez cofre controla el flujo de agua alrededor del cuerpo para influir en la estabilidad y maniobrabilidad.

Con una armadura ósea rígida que cubre un cuerpo en forma de caja, los peces cofre son nadadores sorprendentemente ágiles. Se abren paso fácilmente en entornos físicos complejos que se encuentran en los arrecifes de coral que habitan.

Originalmente, se pensó que la forma cuadrada del pez funcionaba como un marco rígido para mantener estable al pez mientras nadaba; sin embargo, investigaciones más recientes han sugerido que la forma cuadrada en realidad desestabiliza el cuerpo durante la natación y mejora la maniobrabilidad. La estabilidad y la maniobrabilidad en la natación tienden a tener requisitos competitivos. La estabilidad a menudo implica una gama limitada de movimientos, como un atún que mueve la cola de un lado a otro mientras navega por el océano abierto. La maniobrabilidad, por otro lado, implica una amplia gama de movimientos como giros cerrados y cambios de postura. Ser muy estable a menudo significa ser menos hábil para maniobrar, y viceversa. Los investigadores que estudian los peces cofre han observado cómo fluye el agua alrededor de sus cuerpos para determinar cómo la estabilidad y la maniobrabilidad juegan un papel en su comportamiento de natación.

Proyectando desde el caparazón del pez cofre (su cubierta exterior ósea) hay crestas y bordes que afectan la forma en que el agua fluye alrededor de su cuerpo. En un conjunto inicial de experimentos, los investigadores encontraron que estas crestas parecían manipular el flujo para que produjera fuerzas estabilizadoras durante la natación. En un estudio posterior que utilizó diferentes métodos, otros investigadores encontraron que los flujos alrededor de las crestas y el cuerpo deberían desestabilizar el cuerpo en general. Aunque esto puede parecer indeseable, la desestabilización en realidad permite un rango de movimiento mucho más amplio que si el pez cofre estuviera tratando de permanecer constantemente estable. En este último caso, el pez cofre puede usar las aletas pectorales laterales y la aleta caudal para controlar esta desestabilización y, en última instancia, ser muy maniobrable en el agua. La investigación adicional podría ayudar a descubrir exactamente cómo el cuerpo y las aletas del pez cofre trabajan juntos para afectar la estabilidad y la maniobrabilidad a medida que navega en su entorno complejo. 

Última actualización el 28 de febrero de 2018