Los lazos sociales a largo plazo ayudan a los flamencos a sobrevivir brindándose apoyo mutuo.

Introducción

Los científicos rara vez han estudiado las amistades entre animales que no sean humanos y simios. Durante cientos de años, los científicos se negaron a pensar que los animales pudieran tener emociones u otros rasgos humanos. Recientemente, sin embargo, muchos han comenzado a aceptar que hay aves y mamíferos que tienen sentimientos y sentidos, sufren cuando son heridos y forman coaliciones y alianzas con otros individuos para mejorar sus propias condiciones.

A pair of flamingos
Imagen: Simón Berger / Dominio público - Sin restricciones

Las relaciones en la naturaleza no siempre tienen que ver con la reproducción: los flamencos se hacen amigos entre sí.

Flamingos
Imagen: Ganapatía Kumar / Dominio público - Sin restricciones

¿Cuántos de estos flamencos podrían ser amigos emplumados?

La estrategia

En una reserva de vida silvestre inglesa, los científicos estudiaron bandadas de cuatro especies de flamencos. Estas aves zancudas de larga vida se alimentan y se reproducen en grandes bandadas que a veces se cuentan por miles en África, Asia, Europa y las Américas. Los científicos descubrieron que los flamencos preferían pasar el rato con los mismos grupos pequeños de otros flamencos. Estos incluían grupos de dos, tres o cuatro, y estos lazos sociales duraron años. Pero no todo es amistoso; también hay pájaros que se evitan unos a otros.

Los flamencos viven en hábitats donde la supervivencia es difícil. Por ejemplo, el flamenco andino vive en las altas montañas de los Andes de América del Sur. Pasan el verano alimentándose en lagos salados y migran a humedales de menor elevación durante el invierno. Tener relaciones estables con otros flamencos puede ayudarlos a encontrar comida, mejorar el acceso a parejas y hacer frente a las fuentes de estrés, como la escasez de alimentos o la perturbación humana.

Las posibilidades

En un zoológico, puede ser útil hacer un seguimiento de las amistades entre los flamencos marcados. De esa manera, si hay un cambio repentino en la cantidad de tiempo que un flamenco pasa con los demás, podría ser una advertencia de que algo anda mal.

Más información

Última actualización 1 de julio de 2020