Mover en/sobre Líquidos
El agua no solo es el líquido más abundante en la tierra, sino que es vital para la vida, por lo que no sorprende que la mayoría de la vida haya evolucionado para prosperar sobre y debajo de su superficie. Moverse eficientemente dentro y sobre esta sustancia densa y dinámica presenta desafíos y oportunidades únicos para los sistemas vivos. Como resultado, han desarrollado innumerables soluciones para optimizar la resistencia, utilizar la tensión superficial, ajustar la flotabilidad y aprovechar varios tipos de corrientes y dinámicas de fluidos. Por ejemplo, los tiburones pueden deslizarse por el agua al reducir la resistencia debido a su forma aerodinámica y las características especiales de su piel.
Expulsar líquidos
Hay varias razones por las que los sistemas vivos descargan líquidos, como para defenderse, para evitar la acumulación de líquido que puede causar descomposición, para eliminar desechos o para secarse. Debido a que los líquidos no se pueden mover de manera efectiva al empujarlos, se necesita un tipo diferente de fuerza para expulsarlos. Crear esa fuerza requiere energía, por lo que los sistemas vivos deben tener estrategias eficientes que valgan la pena invertir en energía o usar una fuerza externa (como la gravedad). Esto generalmente implica estrategias que acumulan presión o usan otras fuerzas para expulsar los líquidos. Un ejemplo de sistema vivo que expulsa líquidos es la vieira. Esta criatura se mueve a través del agua golpeando sus caparazones, generando un chorro de agua que lo impulsa en la dirección opuesta.