En este ejercicio interactivo de 10 a 20 minutos, las funciones que debe realizar un edificio se comparan con las funciones que debe realizar un árbol, lo que ayuda a los estudiantes a ver que los humanos no estamos solos en nuestra necesidad de resolver desafíos.

Objetivos

  • Los estudiantes compararán la función de un edificio con las funciones de un árbol.
  • Los estudiantes discutirán y sacarán conclusiones sobre lo que la naturaleza puede enseñarnos sobre cómo resolver desafíos tecnológicos.

Los humanos a menudo sentimos que somos tan diferentes de otros organismos que enfrentamos desafíos únicos. Uno de Las enseñanzas más importantes de es que la naturaleza ha tenido que resolver los mismos desafíos que los humanos, y que las soluciones tecnológicas de la naturaleza pueden abordar los desafíos tecnológicos de la humanidad. En otras palabras, no estamos solos: estamos rodeados de una gran cantidad de ideas para resolver nuestros propios desafíos.

Esta actividad transmite esta importante idea al hacer que los estudiantes realicen una lluvia de ideas sobre las funciones que realizan los árboles y aquellas que necesitamos que realicen nuestros edificios. Al comparar las funciones de cada lista, descubrirán que nuestras necesidades tienen mucho en común con las de los árboles.

Esta actividad es una buena introducción a un ejercicio de diseño en el que los estudiantes encuentran su propia inspiración en el mundo natural para ayudarlos con un desafío de diseño.

Para los jóvenes estudiantes, esta actividad podría modificarse o extenderse incorporando la canción "No estamos solos" en el álbum de música infantil, Ask the Planet, y haciendo la actividad de acompañamiento.