El polen de las plantas con flores puede sobrevivir a la deshidratación extrema a través de varios mecanismos, incluida una vía de plegamiento de la pared reversible que da como resultado una impermeabilidad total.

“[U]no de los grandes misterios [del polen] es cómo puede resistir la desecación. Aunque la forma casi esférica de algunas especies genera relaciones de área de superficie a volumen que minimizan la pérdida de agua, y sus paredes están rodeadas por una parte exterior impermeable de exina, esto está interrumpido por aberturas que proporcionan rutas de salida para 'materiales'. '. Y, por más secos que puedan estar los granos de polen, la pérdida de demasiada agua resultará en su muerte. Entonces, es intrigante saber cómo logran mantenerse hidratados. Pues bien, según Elena Katifori et al. (PNAS 107: 7635–7639, 2010) todo se reduce a la 'geometría simple' y un fenómeno llamado armomegacia. Aunque Katifori y sus colegas no inventaron el término, demuestran que los principios geométricos y mecánicos explican cómo la estructura de la pared guía los granos de polen hacia distintos caminos de plegamiento. Durante la armomegasia, la superficie del polen sufre un proceso de plegamiento para producir un grano de polen sellado en el que esas aberturas permeables quedan ordenadamente metidas dentro de la exina impermeable”. (Chaffey 2010:vi)

Última actualización 14 de septiembre de 2016