La lengua de una lamprea puede cortar escamas y piel de pescado debido a su abrasividad.

“La lamprea usa una boca sin mandíbula con forma de ventosa para aferrarse a la trucha, y tiene una lengua feroz y abrasiva con la que abre un agujero en el cuerpo de su huésped. Allí lame los fluidos corporales que rezuman de la herida”. (Foy y Oxford Scientific Films 1982:50)

“En algunos aspectos, la mecánica de la alimentación no se ha explicado adecuadamente, aunque se comprende mejor el papel que desempeña la lengua. Esta estructura está sostenida por un cartílago lingual, que se puede mover ligeramente hacia adelante mediante músculos basilariglossus emparejados, que se originan en el basilar y se insertan en el cartílago. Los lóbulos cortantes de la lengua están sostenidos por un cartílago apical al que están unidos por tendones. Tanto Dawson (1905) como Lanzing (1959) están de acuerdo en que un efecto de raspado es en gran parte responsable de la destrucción inicial del tejido huésped, a través de un movimiento de balanceo de la parte apical de la lengua, producido por los sistemas de transportador y retractor. Además de este efecto de raspado, Lanzing consideró que la retracción de la lengua une las láminas longitudinales en una acción de tijera que sería eficaz para cortar los tejidos del huésped”. (Hardisty y Potter 1971: 158)

Foy S, Oxford Scientific Films. El gran diseño: forma y color en los animales. Lingfield, Surrey, Reino Unido: BLA Publishing Limited para JM Dent & Sons Ltd, Londres; 1982. 238 págs.
MW resistente; Alfarero CI. 1971. La biología de las lampreas. vol. 1 Londres: Prensa Académica. 423p.

Última actualización 18 de agosto de 2016